Ramos de hortensias preservadas

Si hay una planta versátil, y con entidad propia, ¡esa es la hortensia!

Las hortensias preservadas se consiguen partiendo de flor natural, ya sea de Hortensia grandiflora u Hortensia paniculata, y mediante el proceso químico de la preservación se sustituye su sabia y agua, por un gliquerol (agua, glicerina y azúcar) en un proceso no tóxico, simplemente se trata de evitar el marchitamiento natural, y mantener su flexibilidad, textura, volumen e incluso detalles cómo las nervaduras de sus hojas.

¿Has mirado al tras luz un pétalo de hortensia grandiflora? ¡¡Es alucinantemente bello y elegante!!

La hortensia es una flor fácil de conservar deshidratada o liofilizada, sólo hay que saber identificar a finales del verano el giro de sus inflorescencias que indican el punto de madurez vegetal que permiten ser recogidas en la planta para su óptimo secado, pero en ese estado es quebradiza, y sus colores se apagan al deshidratarla.

Las hortensias preservadas guardan sus colores originales, y pueden incluso tener colores que no existen en su estado natural ampliando la gama de color para hacer composiciones de cuento con ellas.

Son flores que requieren ser trabajadas con máxima delicadeza, pero conservan tanta flexibilidad, que en nuestra Tienda Online y taller floral, aprovechamos desde un pétalo hasta toda una inflorescencia para nuestras composiciones, ¡es la flor de las mil opciones!

En @redplantea utilizamos esta maravillosa flor en nuestros tocados para el pelo, boutouniere para boda, tiaras, coronitas, bastidores…etc.

Puedes elegir un ramo donde la hortensia sea una flor protagonista, o una acompañante de un conjunto floral, ya que la montaremos en pequeños conjuntos de flores y la mezcla tendrá un aspecto de ramo silvestre ¡que tanto nos gusta!

Ventajas de las hortensias preservadas

• Al igual que el resto de los ramajes y flores preservadas, tienen una larguísima vida.
• Fácil mantenimiento y sin coste, no atrapan polvo que no se pueda retirar con un secador de pelo en frío y de forma suave, y no dejarán caer sus pétalos con el tiempo.
• Carecen de sustancias químicas que no desprenderán al ambiente, ni al tacto, y no atraen a bichitos molestos.
• No necesitan cuidados de riego, abono o poda, ellas se mantendrán siempre como el día que te llegó nuestro ramo.